Ubicado en el partido de Luján y con tan solo 500 habitantes, Carlos Keen es uno de los pueblos más pintorescos de la Provincia de Buenos Aires. Su extensión es pequeña, con un máximo de ocho cuadras de largo. Durante la semana es una localidad tranquila, los sábados y domingos se convierte en un destino turístico.
Carlos Keen, que se halla a tan solo 50 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se destaca por su producción de quesos artesanales, elaborados con leche de vaca, cabra y oveja. De hecho, tiene algunos lugares en los que es posible pasar la noche y disfrutar de su gastronomía, de su bebida y de los restaurantes de campo.
Cómo llegar y qué hacer en Carlos Keen
La opción más barata para llegar al pueblo es el colectivo. Para los habitantes de Capital Federal y alrededores es conveniente partir desde la estación de Retiro y subirse al autobús con destino a Luján. Una vez que se arriba allí, se debe realizar un trasbordo a un micro local que transporta a los pasajeros al pueblo. Se estiman 50 minutos de viaje.
Además de esta alternativa, en Retiro también es posible tomar un tren con destino a la estación Carlos Keen. Se llega más rápido a destino, con una estimación de 40 minutos en total. Para quienes deseen ir en auto, se debe utilizar la Ruta Nacional 7 hacia Luján hasta la salida 72. Allí se gira por la Ruta Provincial 28 y se continúa el camino hasta llegar al pueblo.
Una vez que se haya arribado a la localidad, se podrán realizar varias actividades. Su principal atractivo es la estación de tren, que por su arquitectura está considerada como un monumento histórico nacional. También hay un Museo del Queso que cuenta toda la historia de su producción. El recorrido por el Parque Natural Municipal Carlos Keen enseña sus mejores lugares y paisajes.
Los quesos más populares
En Carlos Keen, que tiene más de 20 queserías artesanales, consecuencia de los inmigrantes españoles e italianos que se asentaron en el pueblo a principios del Siglo XX y trajeron recetas típicas de sus países, hay una enorme variedad de opciones. Entre ellas, se destacan:
- Queso pategrás: semiduro, de color amarillo claro y sabor suave.
- Queso Mozzarella: blando, blanco y suave.
- Queso brie: cremoso, blanco y suave.
- Queso Criollo: duro, amarillo claro e intenso.
- Queso azul: semiduro, azulado y fuerte.
Se recomienda asistir al lugar en primavera y otoño, las dos épocas del año en las que el clima favorece el consumo de los productos y la temperatura es más agradable para pasar el día.