El próximo domingo celebramos un nuevo Día de la Independencia. Es el momento ideal para reunirse con amigos y familia para compartir y disfrutar de los festejos. Es por eso que hoy te traemos 4 clásicos de la cocina criolla.
- Costillar a la cruz y verduras al rescoldo: lo principal acá, más allá de contar con un espacio abierto para el fuego, es la calidad de la carne. Si preferís más terneza, oprtá por un costillar de forma redondeada. Si preferís una carne más firme y con más grasa, optá por las costillas más anchas y alargadas. En cuanto a las verduras al rescoldo, podés optar por las que más te gusten, siempre que tengas en cuenta que los tiempos de cocción varían mucho según el tipo de vegetal o tubérculo.
- Empanadas fritas: un clásico eterno. Podés elegir el relleno que más te guste, ya que todos van bien. Lo importante acá es usar harina de buena calidad para la masa (en caso de que quieras una masa casera) y un buen aceite para la fritura. Ojo con esto último, al contrario de lo que mucha gente piensa, mientras menos aceite usás, más aceite absorbe la masa, por ende, fijate de usar una buena cantidad y que esté hiper caliente al momento de cocinar las empanadas, así te asegurás una fritura pareja y dentro de todo, sana.
- Locro: primero vas a saltear verdeo, puerro y morrón. A eso le añadís la carne previamente troceada (roast beef, falda con hueso, patitas de cerdo, mondongo, pechito de cerdo, panceta ahumada y chorizo colorado). Después vas a añadir la cantidad deseada de legumbres (maíz blanco partido, porotos y garbanzos) y vas completar con caldo hasta cubrir todo. Podés añadir zapallo trozado para sumar sabor, y obviamente no te olvides de tus condimentos preferidos.
- Humita: un plato perfecto para cualquier día de otoño o invierno. Lo primero que vas a hacer es rallar una cabutia y 6 choclos. Por otro lado, cortá y salteá un morrón rojo y dos cebollas de verdeo (si te gusta, también podés sumar puerro). Vas a incorporar las verduras salteadas con las ralladas, smá un poco de caldo y condimentos y dejá cocinar por hasta dos horas a fuego lento. Servir con queso.
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