La gastronomía refleja mucho más de lo que aparenta. En las películas, en las novelas, en el arte e incluso en la vida, la comida sirve para definir a las personas. En este sentido, es un recurso utilizado por los grandes autores para caracterizar a sus personajes.
Existen novelas que están protagonizadas por chefs o por gente que trabaja en el rubro de la gastronomía, como también por sujetos que frecuentan un mismo bar o un mismo restaurante. Es un elemento que se utiliza para explicar la clase social del personaje, sus vicios y sus gustos.
3 novelas donde la gastronomía cumple un rol importante
Como agua para chocolate
La escritora Laura Esquivel publicó este libro en 1989. Aquí la comida se utiliza para reflejar las emociones de Tita, la protagonista de la historia. Los platos que elabora sirven como metáforas de sus sentimientos y de sus deseos. Por ejemplo, las recetas amargas equivalen al dolor que siente por dentro.
Aquí se cuenta la vida de Tita, la hija menor de una familia mexicana que está destinada a cuidar de su hermana hasta su muerte porque la tradición así se lo exige. Mientras esto sucede, se enamora de Pedro. Rápidamente, tras su lanzamiento, se convirtió en un éxito y en un bestseller que hasta tuvo su adaptación cinematográfica, además de haber sido traducido a más de 30 idiomas.
Cien Años de Soledad
Al igual que la primera en la lista de las novelas, Gabriel García Marquez utiliza la comida como motor narrativo en un relato perteneciente al realismo mágico. En su clásico, considerado como uno de los mejores libros de toda la historia, la gastronomía se aplica para reflejar la cultura y la tradición de los personajes colombianos.
Como su nombre lo indica, la historia recorre 100 años de la familia Buendía, en un relato que combina lo sobrenatural y la magia con la aventura y la tragedia. La gastronomía, además de formar parte de los eventos como los casamientos, se utiliza para representar el amor y la pérdida. En el primero de los casos para elaborar un pastel romántico. El segundo funciona a la inversa y se transforma en cenizas.
Charlie y la Fábrica de Chocolates
Este clásico de Roald Dahl se volvió muy famoso tras sus múltiples versiones cinematográficas. A diferencia de las otras novelas, este es un libro infantil. Es la historia de un niño pobre, Charlie, que sueña con visitar la fábrica de chocolates más grande del mundo.
Por este motivo, tras ganarse un billete dorado, el pequeño tiene la posibilidad de conocer el lugar que desea. Aquí la comida, el chocolate, cumple un papel fundamental para hablar de la importancia de valores como la solidaridad, la bondad y la familia.
